PROSTITUYENDO EL PERIODISMO CIUDADANO: JUAN CARLOS ZEVALLOS DE ‘LA VOZ SANBORJINA’ Y JORGE POMA DE ‘CIUDADANÍA ACTIVA’

Por: Pedro Martínez Valera, Arq.

Director GCM-APERTURA

Así como hay pseudos periodistas y autodenominados ‘comunicadores’ sociales que se prostituyen, venden o se ‘alquilan’ al mejor político de turno, también en política municipal, existen personas llamadas ‘dirigentes vecinales’, que lo que buscan es una cuota de poder, un cargo municipal. En definitiva, sólo mal utilizan el ‘periodismo ciudadano’, sea impreso, radial o televisivo, para postular a una municipalidad o gobierno regional y ‘acomodarse’ con dieta o sueldo fijo durante cuatro años.

DE “OPINIÓN VECINAL” A “LA VOZ SANROBLINA”

En San Borja ya tenemos un nefasto antecedente con el arquitecto y ex-regidor tejadista, Carlos Galarza Contreras de muy triste recordación. De dirigente vecinal y opositor al ex alcalde Jorge Lermo Rengifo, pasó a convertirse en ‘aliado’ o adulón en la primera gestión (2003-2006) del actual alcalde viajero Alberto Tejada Noriega. Por desgracia el boletín gratuito Opinión Vecinal de Carlos Galarza, pasó a convertirse, cuando él fue regidor oficialista sanborjino, en un medio de difusión donde primaba la ‘franela’ pro-alcalde. Luego cuando Galarza cayó en desgracia y fue expectorado por el núcleo íntimo tejadista, su director por arte de ‘travestismo’ municipal, intentó ‘posar’ como de oposición. Hoy en día Carlos Galarza ha perdido lo poco que le quedaba de su credibilidad periodística. Ha pasado a ser un ex regidor, en busca de algún día no muy lejano, volver a sentarse en el concejo municipal de San Borja. Como todos los recuerdan en la municipalidad, llegó en bicicleta y salió en camioneta.

Pero como el mal ejemplo es imitable, en estas elecciones municipales 2010 han surgido, nuevos ‘Galarzas’, que no sólo lo imitan, sino hasta lo superan. Juan Carlos Zevallos Riveros que postula como regidor con el movimiento distrital independiente que encabeza Luis Robles Recavarren, es prueba fiel del ‘transfuguismo vecinal’. Años atrás promocionó al ex alcalde Jorge Lermo. Cuando su esposa fue despedida de la Municipalidad de San Borja (donde hoy trabaja), Zevallos se convirtió en promotor de Alberto Tejada. Cuando éste lo apartó, en el 2006 buscó refugió en el primer regidor Marco Álvarez Vargas y cuando ‘Marquitos’ no le cumplió con el cargo ofrecido, pasó a ser oposición. Y acabar hoy en los brazos de Lucho Robles. Criticando eso sí, de todos los que en algún momento, Juan Carlos Zevallos aduló. ¿Sabrá Luchito lo que le espera a partir de octubre del 2010?

Para este geométrico cambio de ‘look’ municipal, el ‘lermotejaalvaroblista’ Juan Carlos Zevallos, mal utilizó su cargo vecinal, donde se reeligió (sin validez jurídica), y peor aún, se valió también de su boletín gratuito ‘La Voz Sanborjina’. Esta pasó en menos de un año, a ser conocida por sus vecinos, como ‘La Voz Sanmarquina’ (en alusión a su jefe el actual regidor y candidato de Unidad Nacional-PPC, Marco Álvarez), a ser hoy conocida como ‘La Voz Sanroblina’, por alabar a su candidato Luis Robles. Y de yapa y para cuidar las apariencias, Zevallos finge seguir siendo independiente y no figurar como director de su boletín gratuito.

‘CIUDADANÍA ACTIVA’ PROMOCIONA A CANDIDATO LUIS ROBLES
Jorge Poma Quispe fue un desconocido vecino y promotor de un colegio privado, su nombre se conoció a raíz que presidió hace poco más de un año atrás, una junta vecinal comunal, aquellas que promueven y manipulan a su antojo todos los alcaldes, incluido Alberto Tejada de San Borja.

Poma Quispe de ser un vecino preocupado por su vecindario, pasó a ser un vecino preocupado por su salario. El publicar un boletín gratuito llamado ‘Ciudadanía Activa’, le valió para que un desubicado Luis Robles también lo ‘fiche’ para ser candidato a regidor sanborjino. Junto a Juan Carlos Zevallos. Lo lamentable es que Poma ha convertido su boletín en un órgano de publicidad de la candidatura de su jefe Robles. Una vergüenza total.

Un caso aparte es el también ex presidente de junta vecinal comunal, Carlos Valencia Guerra, que sin tener boletín impreso alguno –aunque sea regalado como el de Zevallos y Poma- hoy postula nada menos como alcalde de San Borja del casi inexistente partido político Alianza para el Progreso. Candidatura que ejemplifica la grave crisis que atraviesan nuestros partidos políticos, al extremo de colocar –algunos dirían de ‘llenar’- candidaturas municipales con el primer vecino que se les ‘cruce’ y sin tener una real base político-vecinal en cada distrito.

PUBLI-SHERRYS ENCUBIERTOS EN BOLETINES DE ZEVALLOS Y POMA

Todo indica en nuestra devaluada política municipal, que para ser candidato a regidor o alcalde, se necesita un boletín que se regale casa por casa. Y mejor si se tira al piso. Galarza, Zevallos y Poma son prueba de que basta un poco de crítica pro-bolsillo y tinta maquilladas con participación vecinal, para tentar cargo municipal. ‘La Voz Sanborjina’ y ‘Ciudadanía Activa’, han pasado de ser medios impresos independientes (aunque casi nunca lo fueron), que supuestamente ejercían el ‘periodismo ciudadano’ o ‘alternativo’, para convertirse –sin vergüenza alguna- en boletines publicitarios que ejercen el ‘periodismo militante’. Ese que hace ‘publi-cherrys’ encubiertos a la candidatura de su jefe Luis Robles.

En política hay sumas que restan. Si Luis Robles creyó que teniendo dos boletines gratuitos para hacerle autobombo encubierto a su candidatura, le iba a reportar más votos, se equivocó. Por desgracia, también Robles no es ejemplo de una conducta vecinal independiente y consecuente. Su aparición en San Borja se dio recién hace poco más de un año, cuando de ser fracasado candidato a la alcaldía en el 2006, se convirtió en presidente de una junta vecinal comunal. La intención fue más que grotesca: Mal utilizar una junta vecinal para hacer política partidaria encubierta. Claro está, a favor de su ya ‘conocida’ candidatura de octubre del 2010. Algo censurable en Robles, pero previsible si tenemos en cuenta que fue partícipe de una de las más criticadas gestiones municipales en Santiago de Surco, que encabezó Carlos Dargent Chamot.